Por Ramón Estrella                                                                                                           

Miembro de la Comisión Política

Camaradas, hemos venido desde una lejana isla a compartir con ustedes las experiencias y visiones que sobre los procesos históricos ha desarrollado la Clase Obrera mundial y los Partidos Comunistas.. Nuestro interés no es teorizar o hacer academia, es básicamente práctico, se trata de encontrar caminos para saldar cuentas con el capitalismo y su insaciable acción depredadora contra los creadores de riquezaː La Clase Obrera.

Un partido comunista es un partido político que basa su ideología y prácticas políticas en la teoría marxista en cualquiera de sus modalidades o escuelas y la implementación de una sociedad comunista.

El Partido Comunista surge en la primera mitad del siglo XX como resultado de la I Guerra Mundial (1914-1918), con la Revolución bolchevique (1917) y, sobre todo, por la creación de la Internacional Comunista. Es el resultado de la división de los partidos integrantes de la Segunda Internacional que se oponen a la guerra, apoyan la revolución bolchevique y se consideran revolucionarios y contrarios a las llamadas tácticas nacionalistas y revisionistas que enfatizaron en defensa de las naciones y condujeron al martirio a  ejércitos de obreros reclutados para librar guerras interburguesas.

Para nadie es desconocido que Lenin, en vibrantes, audaces y creativos ensayos, como el ¿Qué hacer? , Un paso adelante, dos pasos atrás, fundamentó las tareas y un  modelo del partido comunista, adaptado a la realidad de la Rusia Zarista, pero sobre leyes dialécticas universalizables. Según Lenin,  el partido es el destacamento de vanguardia de la clase obrera y sus principales funciones son incorporar al movimiento obrero el conocimiento político marxista y dirigir la lucha anti-capitalista en todos sus aspectos. Una de las características esenciales del partido de vanguardia leninista, es que está conformado por revolucionarios conscientes procedentes del proletariado. Otra característica esencial de un partido comunista es el unir el socialismo científico con el movimiento obrero, es decir, un partido comunista solo es vanguardia cuando es reconocido como tal por las masas a las que en teoría representa y las guía.

Mucho tiempo  después, vino el derrumbe, y provocó un ataque cuya diana era insistir en la decadencia de la clase obrera como sujeto histórico en condiciones de ofrecer una alternativa revolucionaria para la transformación de la sociedad. Algunos llegan tan lejos como para negar la propia existencia de los trabajadores como clase. YA NO HAY CLASE OBRERA. (???)

Es sabido que el pragmatismo norteamericano y capitalista en general rinde culto a la espontaneidad, cuestión característica de la ideología burguesa, en su corta visión histórica; el empirismo burgués, es un mirar de corto vuelo.  El marxismo, en cambio, es una visión de la historia en su amplia extensión. No se deja obnubilar por derrotas ni por los giros coyunturales de los acontecimientos sino que toma en cuenta los procesos que se desarrollan en medio y largos plazos, atentos al discurrir de sus contradicciones internas que se desarrollan sin ser notoriamente percibidas. La fortaleza del método de análisis del marxismo está cimentadaen un estudio científico consistente de la sociedad burguesa, de las condiciones que la hicieron surgir, desarrollarse, pero también declinar.

Para los comunistas, solo la lucha ideológica puede dar sostén y consistencia integral a la lucha económica de la clase obrera por mejores condiciones de vida, y a su lucha política por los derechos democráticos y el socialismo.

A propósito de momentos difíciles, de retrocesos incluso, un revolucionario ruso anotó: “En estas condiciones la tarea de la vanguardia consiste, ante todo, en no dejarse sugestionar por el reflujo general: es necesario avanzar contra la corriente. Si las desfavorables relaciones de fuerzas no permiten conservar las antiguas posiciones políticas, por lo menos hay que conservar las posiciones ideológicas, pues la experiencia tan valiosa del pasado se ha concentrado en ellas. Ante los ojos de los mentecatos, tal política aparece como ‘sectaria’. En realidad no hace más que preparar un salto gigantesco hacia adelante impulsada por la oleada ascendente del nuevo período histórico”. (Trostky)

“Al reproducirse el capital, siempre lo hace también su instrumento, la fuerza de trabajo. El término acumulación del capital equivale al de aumento del proletariado” (Marx)

Conscientes de estos vaivenes de la lucha de clases, la  FR hará los esfuerzos que son necesarios y posibles para que la construcción de una hegemonía colectiva, termine concretándose en una expresión consciente y organizada del sujeto clasista, popular y transformador. Esto exige amplitud de miras, un espíritu amplio, ni sectario ni dogmático, objetivo y realista. Ratificamos, que se necesita de un instrumento para la conducción de la lucha de clases, y ese es el Partido, para profundizar en conquistas democráticas, participativas, producir la justicia social, concluir el proceso de liberación nacional y la construcción de un Poder Popular que viabilice procesualmente el tránsito al socialismo y el comunismo en un proceso ininterrumpido de la revolución.

Como nuestra denominación no es la de Partido Comunista, ya que éste se refundió con otras fuerzas del país, acentuamos nuestro carácter marxista-leninista con nuestro lemaː POPULAR, CAAMAÑISTA Y COMUNISTA. Y con nuestro himno,  LA INTERNACIONAL COMUNISTA.

Advertimos a ustedes, camaradas de tantos y diferentes países y regiones aquí presentes,  que en América Latina se desata desde hace varios lustros una ofensiva contrarevolucionaria del imperialismo norteamericano y las burguesías de muchos países, que debe serenfrentada con la firmeza ideológica de la clase obrera y los comunistas, pero también con la multiplicidad de clases, estratos y capas que han venido construyendo en sus luchas, caminos progresistas y antiimperialistas, porque no hay salidas  ni soluciones, si la clase objetivamente precondicionada y mayoritariaː los trabajadores, no son capaces de contraponer a la tragedia actual, la sociedad socialista,  expresión insustituible de la solución a los problemas existenciales de la humanidad.

La judicialización de la política es un arma de quinta generación que ha dado muchos beneficios al plan desestabilizador de los Estados Unidos, veamos los ejemplos de Argentina, Brasil, Paraguay, Honduras,  y otros países. Debemos tratar con pinzas este tema, que si bien tiene implicaciones éticas reconocibles, quienes menos moral tienen para manejarlo son precisamente los que chorreando sangre por sus poros han hecho la acumulación de capital,despojando, robando a los trabajadores las riquezas por ellos producidas.

Muchas gracias.