Sumario:
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El PCV propone medidas urgentes en beneficio de los intereses del país y los trabajadores
LA SOLUCIÓN DE FONDO ES LA TOMA DEL PODER
Tribuna Popular.- El Partido Comunista de Venezuela (PCV) manifestó que en los países de Latinoamérica que –como el nuestro– viven experiencias de procesos progresistas, amenazados por las fuerzas al servicio de los monopolios imperialistas, pero también extremadamente débiles ante las inconsecuencias de sus direcciones reformistas, la solución de fondo es la toma revolucionaria del poder por la clase obrera en alianza con el resto del pueblo trabajador de la ciudad y el campo.
Ante la agudización de las contradicciones mundiales interimperialistas e intercapitalistas, y la crisis del modelo capitalista dependiente y rentista de Venezuela, el PCV enfatizó que se hace patente la necesidad de una salida revolucionaria, es decir, en favor de los intereses populares y no de la burguesía.
El Partido del Gallo Rojo ha señalado con medular claridad que en nuestro país el Gobierno nacional, en contravía de su retórica «revolucionaria», aplica políticas de liberalización económica y promueve relaciones laborales flexibles, pulverizando el salario y favoreciendo las apetencias lucrativas de diversos sectores del capital.
No en vano, puntualizó el PCV, el 11 de octubre de 2018 el ministro del Trabajo, Eduardo Piñate, dictó el Memorando-Circular Nº 2792 con los nefastos «Lineamientos» que crearon un marco favorable para que las convenciones colectivas fueran desmejoradas y se destruyeran derechos individuales y colectivos de las y los trabajadores, tanto en el sector público como en el sector privado.
HAY QUE CAMBIAR LA POLÍTICA
El PCV ha reiterado su exigencia de que el Ejecutivo nacional adopte una política laboral diferente a la actual, que sirva a los trabajadores para defenderse frente a los ataques de la patronal pero también para que la clase obrera ejerza un papel dirigente en el proceso social y político venezolano.
Los comunistas demandan que se restituyan los derechos infringidos de todos los trabajadores, especialmente de aquellos que han sido víctimas de suspensiones y despidos injustificados e ilegales, como en el caso de Coca-Cola Femsa, Polar, Cealco, Abastos Bicentenario, Centrales Azucareros, entre muchas otras entidades de trabajo públicos y privados.
En algunos casos, resaltó el PCV, las acciones se han cometido con la aplicación fraudulenta del artículo 148 de la Ley del Trabajo (LOTTT), con la complicidad de funcionarios del Ministerio del Trabajo.
Por todo ello, y por manifiesta y reiterada actitud antiobrera y antisindical, el PCV continúa exigiendo al presidente Maduro que destituya al ministro Piñate e inicie un proceso de depuración de todas las instancias dependientes del Min-Trabajo, en articulación con el personal que labora en ellas.
Asimismo, insiste en que en lo inmediato –junto a una política integral de control obrero-popular sobre las estructuras de costos, precios y ganancias– debe aplicarse una política salarial progresista, que sirva a los trabajadores para recuperar la capacidad adquisitiva del salario, tomando como referencia los índices de precios de los bienes y servicios que constituyen la canasta básica, ya que actualmente el salario mínimo equivale a menos de dos dólares mensuales.
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Salario debe cubrir la canasta básica
Caracas.- El Partido Comunista de Venezuela (PCV) planteó que un aspecto vital para la familia venezolana es el referido al salario, por lo que demandó del Gobierno nacional el cumplimiento de lo establecido en la Constitución, en el sentido de que las y los trabajadores perciban un salario que les permita cubrir la canasta básica familiar.
«El salario mínimo, es decir, la persona que menos gana, debe poder cubrir las necesidades básicas de alimentación, vivienda, educación, recreación y transporte. Actualmente los BsS 40.000 mensuales, de salario mínimo y pensiones, no alcanza ni para pagar dos pasajes diarios en el transporte urbano», alertaron los comunistas.
Diversas fuerzas, entre ellas el PCV, han recordado el compromiso del presidente Nicolás Maduro en agosto de 2018, referido a que el salario mínimo sería equivalente a medio ‘petro’, es decir, a 30 dólares (con un precio referencial del barril de petróleo a USD 60)», y que a lo largo de más de un año no se ha cumplido».
Pero –acotó la tolda del Gallo Rojo–, incluso, si se cumple, ese monto no alcanzaría para ir al mercado y menos para cubrir el conjunto de necesidades de la familia trabajadora.
Hoy en día, considerando el cambio oficial de 21.028 BsS/USD, 30 dólares equivalen a BsS 630.840, que según diversas estimaciones representa menos del 20% del costo de la canasta básica de alimentos, bienes y servicios.
Artículo 91 de la CRBV
Todo trabajador o trabajadora tiene derecho a un salario suficiente que le permita vivir con dignidad y cubrir para sí y su familia las necesidades básicas materiales, sociales e intelectuales. […] El salario […] se pagará periódica y oportunamente en moneda de curso legal […].
El Estado garantizará a los trabajadores y trabajadoras del sector público y del sector privado un salario mínimo vital que será ajustado cada año, tomando como una de las referencias el costo de la canasta básica. La Ley establecerá la forma y el procedimiento.
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Un año combatiendo los Lineamientos del Min-Trabajo
Tribuna Popular.- Este 11 de octubre se cumple un año desde que el ministro del Trabajo, Eduardo Piñate, emitió el Memorando-Circular denominado «Lineamientos para ser implementados en las negociaciones colectivas de trabajo en el marco del Programa de Recuperación, Crecimiento y Prosperidad Económica», el cual fue oportunamente denunciado por el Partido Comunista de Venezuela (PCV) y, junto al Frente Nacional de Lucha de la Clase Trabajadora (FNLCT), firmemente combatido a lo largo de estos meses.
En el documento «El PCV desmonta y denuncia la política salarial regresiva», del 29 de octubre y que puede leerse íntegro en https://prensapcv.wordpress.com, la organización comunista rebatió uno a uno los pretendidos argumentos en los Lineamientos del ministro y puso en evidencia que el objetivo esencial de la política laboral y salarial del Gobierno es administrar la crisis en favor del capital.
A partir de la aplicación de dichos Lineamientos, se implementaron aplanamientos y reducciones de las escalas salariales y otros beneficios establecidos en las convenciones colectivas del sector público y el privado, con la premisa de que los beneficios conquistados por la lucha de los trabajadores pueden rebajarse o eliminarse si estos «resultaren onerosos y de difícil cumplimiento» o «pongan en riesgo la fuente y el proceso social de trabajo».
De ahí que el Partido del Gallo Rojo ha señalado categóricamente que esa política salarial es regresiva y contraria a la LOTTT y a la Constitución que en su artículo 89 consagra el principio de progresividad e intangibilidad de los derechos laborales, por lo que llamó «a la clase obrera a unir sus fuerzas con las del pueblo trabajador de la ciudad y el campo, para la defensa de sus conquistas y por una salida revolucionaria a la crisis».
En el marco de una ofensiva unitaria del movimiento obrero y sindical clasista, que se inscribe en una estrategia de acumulación de fuerzas de la clase obrera y el pueblo trabajador para batirse por el poder, el PCV y el FNLCT inmediatamente iniciaron diversas acciones en defensa de las conquistas contractuales y demás derechos del pueblo trabajador.
El 8 de noviembre se realizó un Encuentro Nacional del Sindicalismo Clasista, el cual asumió un plan de ofensiva clasista y unitaria que empezó el 15 de noviembre mediante masivas concentraciones conjuntamente con fuerzas campesinas y del movimiento popular comunitario en la Asamblea Nacional Constituyente y la Vicepresidencia Ejecutiva de la República, y luego, el 29 de noviembre a la sede del Min-Trabajo.
Con firmeza se mantiene la exigencia de una rectificación en las políticas laborales del Gobierno, que se adopte una política salarial progresista y se rescaten las empresas del Estado en vez de destruirlas y entregarlas al capital privado.
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Reorientar la política económica, laboral y agraria para una salida revolucionaria a la crisis.
Organizaciones discuten plan unitario de lucha
Caracas.- Diversas organizaciones del movimiento obrero y sindical clasista, del movimiento agrario y del movimiento popular-comunitario, se reunieron el pasado 26 de septiembre, en el edificio Cantaclaro, sede del Partido Comunista de Venezuela (PCV), para discutir la adopción de un plan nacional unitario de lucha, por una política económica, laboral y agraria que preserve y fortalezca los derechos del pueblo.
Asimismo, analizaron la realización de una gran movilización obrera, campesina, comunera y popular, para exigir al Gobierno nacional una reorientación de las políticas que desarrolla en beneficio de la burguesía y en detrimento del pueblo trabajador de la ciudad y el campo, con miras a lograr una salida revolucionaria a la crisis del capitalismo dependiente y rentista de Venezuela.
Pedro Eusse, coordinador general del Frente Nacional de Lucha de la Clase Trabajadora (FNLCT), señaló que «la crisis que sufrimos en nuestro país está siendo administrada con unos criterios que favorecen a los capitalistas y a las mafias corruptas en las que participan funcionarios civiles y militares».
«Planteamos un cambio profundo en las políticas gubernamentales, para proteger a los trabajadores y todo el pueblo frente a las bestiales arremetidas de la burguesía, los monopolios y los burócratas», expresó Eusse, al tiempo que ratificó el rechazo contundente del FNLCT a las amenazas y agresiones que desarrolla el imperialismo estadounidense contra Venezuela. «Esas agresiones y la crisis que padecemos deben ser enfrentadas con la unidad del pueblo trabajador, exigiendo respuestas y soluciones revolucionarias», enfatizó el dirigente.
Para propiciar la solidaridad internacional del movimiento obrero y sindical clasista con estas luchas, contra el imperialismo estadounidense y el reformismo entreguista, Eusse, en representación del FNLCT, asistió al Encuentro Regional de organizaciones afiliadas y amigas de la Federación Sindical Mundial (FSM) en América Latina y el Caribe, del 1 al 4 de octubre, en Buenos Aires, Argentina.
El encuentro también contaría con la presencia de George Mavrikos, secretario general de la FSM, y constituye el evento central por los 74 años de la federación que agrupa más de 97 millones de trabajadores afiliados en 130 países de todo el mundo.
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PCV continúa exigiendo castigo a los culpables y asignación de tierras a campesinos
Un año de impunidad en asesinato de Luis Fajardo
Tribuna Popular.- El miércoles 31 de octubre de 2018 se produjo el vil, cobarde y alevoso asesinato de Luis Fajardo, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Venezuela (PCV) y de la dirección colectiva de la Corriente Clasista Campesina «Nicomedes Abreu» (CCC-NA), junto a Javier Aldana, activista del movimiento campesino.
El hecho ocurrió en el sector La Palma, Nueva Bolivia, municipio Tulio Febres Cordero, del estado Mérida, cuando ambos llegaban en moto a la vivienda de Fajardo tras una jornada de trabajo.
Desde ese momento, y a lo largo de un año, el PCV ha denunciado el caso y demandado del Gobierno nacional y demás instituciones del Estado una investigación profunda y el consecuente castigo ejemplar a los responsables intelectuales, materiales y cómplices del asesinato; pero sin resultados efectivos hasta ahora.
Fajardo, un combativo dirigente campesino, encabezaba, entre otras, la lucha por el rescate del fundo Caño Rico, en el sector Las Veritas, parroquia Gibraltar del municipio Sucre, en el Sur del Lago de Maracaibo, del estado Zulia.
Más de 300 familias, organizadas en consejos campesinos, cooperativas y frentes campesinos, exigían –y aún lo hacen– que el Instituto Nacional de Tierras (INTI) les regularice la entrega del fundo, para el rescate de 522 hectáreas no cultivadas y que permanecen socialmente ociosas en un 95%.
CÍRCULO MAFIOSO Y CRIMINAL
En su momento, Oscar Figuera, secretario general del PCV, resaltó que «a partir de esas luchas, durante meses se llevó a cabo hostigamiento, persecución y amenazas permanentes contra nuestro camarada. Y estas acciones provenían principalmente de Carlos Sulbarán, terrateniente de la zona, y su administrador Héctor Soto», por lo que señaló que debían ser los primeros en investigarse.
El dirigente manifestó que en torno a este asesinato «hay un círculo mafioso del que también forman parte Guly Bert Antúnez, legislador del estado Zulia; el capitán José Villasmil Toro y el sargento Freddy Ojeda, de la Guardia Nacional; y la Fiscalía 21 con sede en Caja Seca, municipio Sucre (Zulia)».
Adicionalmente, expresó que «en esa sociedad de cómplices que opera a favor de los terratenientes, destaca el caso de instituciones que les correspondía actuar y que no lo hicieron, como el INTI y el Ministerio de Agricultura y Tierras, cuyo retraso interesado en la regularización de la entrega de las tierras a las familias campesinas le daba tiempo a los terratenientes para desalojar a los campesinos, destruir sus cosechas e intentar demostrar que las tierras no estaban ocupadas ni productivas por parte de estas familias».
Figuera enfatizó que estas denuncias se hicieron públicas y se formalizaron institucionalmente, pero que «no hubo ninguna respuesta ni medida de la Fiscalía, del Gobierno o de otra institución del Estado para la protección a la vida de los dirigentes campesinos de la zona y particularmente del camarada Luis Fajardo».
JUSTICIA EN SU DOBLE DIMENSIÓN
El PCV recordó que el asesinato se ejecutó a pocos días de realizarse la inspección de organismos nacionales en el fundo Caño Rico, «la cual se logró a partir de la presión política y de masas que se hizo».
El Partido del Gallo Rojo ha insistido en que las instituciones del Estado deben responder garantizando no más impunidad, aplicación máxima de la ley a los responsables del asesinato, y solución a las demandas de los campesinos.
En este sentido, los comunistas continúan exigiendo justicia en la doble dimensión: descubrir y sancionar a los autores intelectuales, materiales y cómplices, y la entrega inmediata de las tierras a las familias campesinas reclamantes.
HOMENAJE A SUS 50 AÑOS
Fajardo era oriundo de la población de San Nicolás, municipio San Genaro de Boconoito, del estado Portuguesa, y desde hace años se había radicado en el Eje Panamericano del estado Mérida, donde se destacó por su ejemplar compromiso revolucionario y disciplina militante, sin importar lo difícil, exigente o riesgosa que fuesen las tareas asignadas.
Se convirtió en uno de los principales dirigentes campesinos surgidos al fragor de los combates en defensa y por la aplicación de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario a partir del 2002, impulsando las luchas por la dotación de tierras a las familias campesinas en la zona del Sur del Lago, convirtiéndose en líder del primer rescate de tierra que se realizó sobre el fundo Santa Ana, ubicado en el municipio Febres Cordero (Mérida).
El próximo 10 de octubre se cumplen 50 años de su nacimiento, por lo que el PCV y la CCC-NA convocan al movimiento campesino y popular revolucionario a un acto de homenaje que se llevará a cabo ese día en el edificio Cantaclaro, sede nacional del PCV, a las 10am.
Lentitud institucional
Tribuna Popular.- Una semana después del asesinato de Fajardo y Aldana, el 7 de noviembre de 2018 una comisión del Buró Político del PCV se reunió con la vicefiscal general de la República, Beysce Loreto, y al día siguiente con la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, a quienes se les expuso el caso con la exigencia de que se haga justicia integral.
Además, se les planteó el atentado al dirigente campesino del PCV en Barinas, Robinson García, el 9 de octubre anterior; la reversión en asignaciones de tierras en beneficio de particulares; graves situaciones en el ámbito laboral; y el incumplimiento del Acuerdo unitario marco PSUV-PCV.
Ambas funcionarias tuvieron buena receptividad en los temas planteados, pero aclararon que el «ejecútese» de varios de ellos dependía del fiscal Tarek William Saab y el presidente Nicolás Maduro, respectivamente, por lo que el PCV les enfatizó la importancia y urgencia de reuniones directas con cada uno, lo cual no se ha materializado hasta el día de hoy.
La laxitud institucional también se constata en el hecho de que el 14 de junio de 2018 (ver TP Nº 2.996), el PCV alertó sobre «las amenazas de muerte contra el camarada Luis Fajardo [y otros dirigentes campesinos]», y reclamó «al Gobierno nacional medidas urgentes que garanticen la seguridad e integridad de estos líderes populares y de sus familias».
Y el 19 de julio de 2018 (TP Nº 2.998), señaló «la actuación impune de funcionarios castrenses, de burócratas del INTI, y de terratenientes civiles y militares […] amenazando la vida de Luis Fajardo».
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PCV será quien decida si se reincorpora o no
Caracas.- Ante las diversas especulaciones surgidas a raíz de los términos del primer punto del acuerdo suscrito, el pasado 16 de septiembre, por el Gobierno nacional y un sector de la oposición, que establece la incorporación de «la fracción parlamentaria del Partido Socialista Unido de Venezuela y las fracciones aliadas del gobierno bolivariano» a la Asamblea Nacional en desacato, Oscar Figuera, secretario general del Partido Comunista de Venezuela (PCV), dejó claro que ninguna persona, organización o partido puede hablar, dialogar o llegar a acuerdos en nombre del PCV.
«Únicamente a las instancias de dirección del PCV es a las que les corresponde decidir sobre la actuación de las y los diputados comunistas», manifestó Figuera, enfatizando que «no nos hemos incorporado a las sesiones ni comisiones de la Asamblea Nacional (AN) en desacato».
Adicionalmente, el dirigente señaló que el Partido del Gallo Rojo no ha suscrito ni forma parte de dicho acuerdo, «el PCV sigue siendo parte del Gran Polo Patriótico ‘Simón Bolívar’, pero el GPP no se ha reunido para discutir ese acuerdo».
«El PCV –complementó Figuera–, le planteó directamente a la vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, y luego también al gobernador de Miranda, Héctor Rodríguez, la importancia de que se reúna el GPP para intercambiar sobre ese acuerdo que se firmó, y poder conocer en profundidad sus alcances».
Figuera recordó que el 24 de septiembre se incorporaron los diputados del PSUV, «producto del acuerdo entre el Gobierno del presidente Nicolás Maduro y un sector de la oposición socialdemócrata, democristiana y liberal que se deslindó de los sectores de la ultraderecha proimperialista que sigue los dictados que les indican desde el gobierno estadounidense».
«Todo lo referido a este tema será discutido en el 15º Pleno del Comité Central, del 11 al 13 de octubre, el cual decidirá acerca de la posible incorporación del PCV a las mesas temáticas establecidas en el acuerdo, así como sobre la reincorporación o no a las sesiones y comisiones de la AN en desacato», amplió Figuera.
Hay aspectos muy complejos, reflexionó el dirigente, «como el del desacato de la AN producto del desconocimiento a los demás poderes del Estado, particularmente al Ejecutivo y al Judicial, y el hecho de que se ha constituido en un instrumento al servicio del imperialismo estadounidense y sus aliados europeos».
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Festival Joven Guardia se plantó en la frontera
Prensa JCV.- La población de La Victoria, estado Apure, colindante con el Departamento colombiano de Arauca, del 19 al 22 de septiembre, recibió con hospitalidad el 6º Festival Joven Guardia, que desde el 2012 impulsa la Juventud Comunista de Venezuela (JCV) como parte de las actividades para conmemorar su aniversario, y que por primera vez se realizó fuera de Caracas.
El Festival rindió homenaje al centenario del destacado luchador comunista Argimiro Gabaldón, «Comandante Carache», de cuyo poema «No permitas que tu dolor se esconda» se inspiró la consigna del Festival: «Somos la vida y la alegría en tremenda lucha contra el imperialismo y la guerra».
La programación inició con una jornada de trabajo voluntario en la que militantes, amigos e invitados, organizados en las columnas «Ilich Ramírez» y «Luis Fajardo», limpiaron, restauraron y acondicionaron espacios públicos de la localidad como el ambulatorio, la Casa de la Cultura y la Escuela Técnica Agropecuaria; trasladándose posteriormente a la Planta de Reciclaje y Compostaje de El Ripial, que dirigen militantes del PCV.
Producto de la articulación de la JCV con líderes deportivos y atletas de la zona, se llevaron a cabo torneos de fútbol, ajedrez y baloncesto en los que participaron niños y jóvenes de diversos sectores populares.
La programación de la «Ruta cultural», en la cancha deportiva Adriana de Quintana, contó con obras teatro, declamaciones, magia, cuentacuentos, malabares y demás artes circenses, así como la presentación de agrupaciones musicales de joropo llanero y el grupo de rock Guaica Afrocaribe.
LA LUCHA CONTINÚA
En los espacios del Batallón Caribe 923 del Ejército venezolano, fortaleciendo la unidad cívico-militar, se llevó a cabo el foro «Desde el Congreso de Angostura pasando por Las Queseras del medio a Boyacá: vigencia de la gesta heroica de los libertadores de América a 200 años», cuya ponencia central estuvo a cargo de Janohi Rosas, secretaria general de la JCV.
La dirigente destacó la importancia de conocer y estudiar las luchas por la independencia y su relación con los combates actuales en defensa del desarrollo soberano, y resaltó que «los jóvenes de hoy somos los continuadores de la tradición histórica de lucha del pueblo venezolano y latinoamericano».
Poco antes de culminar el Festival, en el auditorio de la Casa de la Cultura, tuvo lugar el panel: «Resistencia y lucha de los pueblos frente a la crisis capitalista y las agresiones del imperialismo», integrado por Oscar Figuera, secretario general del PCV; Hugo Rojas, responsable del Área Internacional de la JCV para América Latina; la Comuna «La Gran Victoria»; así como Juventud Rebelde y el Movimiento Marcha Patriótica, de Colombia.
El 6º Festival reafirmó la necesidad de reforzar la unidad colombo-venezolana frente a las pretensiones del imperialismo estadounidense en plagar de guerras a los pueblos que luchan por sus derechos, por la liberación nacional y el socialismo.
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COMBATE PROLETARIO
FSM: Poderosa vigencia del sindicalismo clasista internacional
PEDRO EUSSE. Especial para TP
Coordinador general de la Corriente Clasista
de Trabajadores «Cruz Villegas» / FNLCT
Al término de la Segunda Guerra Mundial es fundada la Federación Sindical Mundial (FSM), el 3 de octubre de 1945, referente del sindicalismo clasista planetario que expresa los genuinos intereses y objetivos de las y los trabajadores de los cinco continentes, en lucha contra el imperialismo y por el poder para la clase obrera, como preámbulo de su definitiva emancipación y la erradicación de toda forma de explotación entre los seres humanos.
La FSM fue central sindical internacional única hasta 1949, cuando fue dividida como resultado de una conspiración del imperialismo yanqui y europeo, con las tendencias sindicales desclasadas, conformando la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (CIOSL), portavoz de una política de colaboración y subordinación de clase para la preservación del capitalismo.
Posteriormente, en el 2006, como parte de la estrategia de dominación de los capitales transnacionales, son fusionadas la socialdemócrata CIOLS y la socialcristiana CMT, creándose la Confederación Sindical Internacional (CSI), que apuntala la rendición y sometimiento de las y los trabajadores frente al capital y los Estados burgueses.
POR LA TOMA DEL PODER
Con el triunfo contrarrevolucionario en la URSS y demás países socialistas de Europa del Este, algunos llegaron a creer que la FSM entraría en crisis y desaparecería, tal y como los ideólogos burgueses pregonaban el «fin de la historia», ilusionados con la fantasía de un mundo donde los explotadores no tendrían contrincantes que lucharan por la justicia social.
Sin embargo, la FSM siguió y sigue en la pelea levantando las banderas del internacionalismo proletario, confrontando a los patronos y a sus gobiernos, procurando la mayor unidad de la clase trabajadora del planeta para derrotar al imperialismo y sus políticas de dominación y opresión de los pueblos.
En el marco de la crisis estructural del capitalismo, resultado de la profundización de su contradicción fundamental (entre el carácter colectivo de la producción y el carácter cada vez más individual de la apropiación), con la agudización de la lucha de clases y el agravamiento de las contradicciones interimperialistas e intercapitalistas, la clase obrera mundial batalla contra las políticas del gran capital y particularmente de sus expresiones neoliberales, destructoras de derechos y conquistas sociales y laborales. De allí la importancia de fortalecer a la FSM y reducir la influencia perniciosa y desclasada de la CSI.
Ante la profunda agudización de las contradicciones inherentes al capitalismo en su fase imperialista, el papel esencial del movimiento obrero y sindical clasista es luchar por que la clase obrera, en alianza con el resto del pueblo trabajador de la ciudad y el campo, avance hacia la toma del poder para producir cambios revolucionarios que abran caminos hacia la construcción de una sociedad sin explotados ni explotadores.
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El 70° aniversario de la nueva China
ENRIQUE GARCIA ROJAS. Especial para TP
Profesor de Literatura
El 1 de octubre de 1949, Mao Zedong, máximo líder del Partido Comunista de China (PCCh), proclamó formalmente, desde la Puerta de Tiananmen de la Ciudad Prohibida de Beijing, el establecimiento de la República Popular China (RPC). Este acto puso fin a varias décadas de guerras e inestabilidad, y dio inicio a la difícil tarea de la reconstrucción nacional.
En esa oportunidad, se izó por vez primera la bandera de la nueva república, cuyo diseño simboliza el contenido de la gran transformación social que apenas comenzaba: un lienzo rojo, color representativo de los ideales revolucionarios, con una gran estrella dorada que representa al Partido Comunista, vanguardia y fuerza rectora de la nueva sociedad, rodeada de cuatro estrellas doradas menores, representativas de las cuatro clases sociales que formaron la alianza revolucionaria: clase obrera, campesinado, burguesía nacional e intelectualidad urbana.
Desde entonces, la RPC ha logrado inmensos avances, pasando de la condición de país atrasado y devastado por la guerra civil y la guerra de resistencia contra la ocupación japonesa, a ser uno de los países de más rápido crecimiento en toda la historia mundial. En la actualidad, la RPC se encuentra a punto de hacer realidad uno de los sueños milenarios de la humanidad: la completa eliminación de la pobreza, objetivo cuyo cumplimiento se tiene previsto para 2021, año centenario del PCCh.
China ha sobrepasado en rápida sucesión a casi todos los países capitalistas que mostraban hace pocas décadas niveles de desarrollo económico y tecnológico y de bienestar social muy superiores a los de la RPC, y se estima que alrededor de 2030 sobrepase también a EEUU y se convierta así en la mayor economía del mundo.
Todo ello ha sido posible con el liderazgo del PCCh y dentro del marco del proceso de construcción del socialismo. Como afirma en su preámbulo la actual Constitución de la RPC: «Desde la fundación de la República Popular China nuestra sociedad ha pasado progresivamente de la nueva democracia al socialismo. Se ha consumado la transformación socialista de la propiedad privada sobre los medios de producción, se ha abolido el sistema de explotación del hombre por el hombre y ha quedado definitivamente implantado el sistema socialista. Se ha consolidado y desarrollado la dictadura democrática popular, que es, en esencia, la dictadura del proletariado dirigida por la clase obrera y basada en la alianza obrero-campesina».